En estos tiempos que corren creemos fundamental reflexionar sobre la relación entre territorio, comunidad y archivos cuando, en medio de la pandemia, y en pocas semanas, se juntan el inicio de las campañas por el plebiscito nacional del próximo 25 de octubre, el recuerdo doloroso del 11 de septiembre de 1973, la conmemoración de los 47 años del Golpe de Estado y la celebración de la Primera Junta de Gobierno, entendida como la emancipación de la Corona Española pero sin  considerar a los pueblos originarios que incluso hoy no tienen una voz legitimada en los procesos institucionales. ¿Qué son los procesos sociales sino tramas que nos determinan? ¿Qué nos une? ¿Es que la determinación arbitraria del territorio nos obliga a un espacio común?

Territorio y comunidad son lugares de tensión e intercambio. Los archivos, sobre todo si vienen desde la ciudadanía, nos pueden dar luces sobre estas tensiones; territorios como metáforas de cuerpos orgánicos, de intentos forzados de homogeneización y ejercicios de resistencia que quedan grabados y pueden ser señalados en los archivos. Como colectivo Arde, no tenemos visiones clausuradas de los temas que proponemos, pero sí nos posicionamos firmes ante la necesidad fundamental de valorar y legitimar las demandas y las memorias de las diversas culturas y comunidades que componen este territorio. 

Siguiendo esta línea, destacamos del archivo Arde esta fotografía de la obra A Sangre e´Pato del colectivo La Patogallina. La fotografía fue tomada por Rocío Ahumada y corresponde a una función realizada en las afueras del MAC Parque Forestal el año 1998. Recomendamos este documento porque refleja una época en la que se armaba una comunidad de artistas del malabarismo y otras prácticas circenses en los alrededores del museo.

De otros archivos y sitios web, recomendamos el proyecto La Ciudad como Texto de la diseñadora Carolina Ureta Marín, que permite hacer una caminata virtual por la Alameda, desde Plaza Dignidad hasta el Palacio La Moneda, para ver los muros de las calles pintados e intervenidos por el estallido social #noseborra

Destacamos el proyecto Iconoclasistas, dúo argentino formado por Julia Risler y Pablo Ares, que desde el año 2006 se dedican a generar mapeos colectivos, cartografía crítica y recursos gráficos de código abierto. Hace algunos días compartieron un texto   que escribieron sobre procesos de mapeo de extractivismos y resistencias populares en Latinoamérica. Este texto es parte del libro «Arte y Ecología Política».

Desde el sur de Chile compartimos el trabajo del Centro Cultural Museo y Memoria de Neltume, que se dedica a resguardar las memorias de este territorio que fue testigo de la reforma agraria, la represión militar, graves violaciones a los derechos humanos en contexto de dictadura, la lucha guerrillera contra el régimen y la devastación de los recursos naturales. 

De nuestras amigas de Memoria del siglo XX recomendamos sus manuales de metodología para trabajar proyectos de archivos y memorias comunitarias. Sobre este trabajo, nos dicen que “es la propia comunidad la que define aquello que considera parte de su patrimonio, entendiendo que éste no es algo dado de una vez y para siempre, sino algo que se construye socialmente”.

Para finalizar compartimos las postales y citas que trabajamos para reflexionar sobre archivos y territorios: